Cerveza casera – Mejor cuando la hago yo

La posibilidad de fabricarnos nuestra propia cerveza casera de la más alta calidad es una realidad al alcance de cualquiera que desee hacerlo.

Desde casa con pasión

A menudo me planteo cuál es el significado actualizado a nuestros días del término lujo. Sin pretender buscarle la tres patas al gato, parto de la base con su definición bien entendida y a su vez, una amplia capacidad de observación para poder cuestionar todo aquello que se nos vende como axioma indiscutible.

Con todas las necesidades básicas cubiertas y garantizadas a priori, esta sociedad* ofrece un inagotable río de productos denominados «de lujo» al alcance tan solo del Dinero. ¿Eso es el lujo?

Ahora que ha desaparecido el hambre*, ahora que el frío y el calor extremo parecen haber sido «domesticados» por la tecnología, ahora que una pandemia dura el tiempo de adaptar un fármaco… ¿qué es el lujo?

Esta pregunta hecha hace tan solo un siglo, a cualquiera que haya leído un poco de historia o escuchado a sus padres y abuelos, conlleva respuestas totalmente arcaicas a nuestra realidad cotidiana.

Tener coche no parece ser un lujo a la vista de calles y carreteras, entonces, ¿dependerá del tipo de coche?; comer, a la vista de supermercados y plazas de abastos, tampoco, ¿lo será el qué comer? …esta cadena podría extenderla durante cien líneas más mencionando cosas como la ropa, la vivienda y el móvil entre otras muchas, pero creo dejar claro la intención con un par de ejemplos. Lo que se nos vende como lujo no es ni más ni menos que el conocido concepto de La carrera de la rata.

La Carrera de la Rata, el estrés y nuestro tiempo

El principio universal de acción y reacción hace que si miramos hacia el extremo opuesto de esta disertación, veamos lo que realmente nos cuesta esta conducta circular y viciosa: nuestro tiempo.

Si el estrés y «la falta de tiempo» son las quejas a menudo más repetidas y escuchadas en estos años del nuevo milenio, entonces hemos dado con la respuesta: el lujo del siglo XXI es el tiempo.

¡Qué curioso! por primera vez en la historia de la humanidad el lujo no es algo externo que no se posea, al contrario, entregamos nuestro tiempo para después quejarnos de su falta.

Entregamos nuestro tiempo (que es nuestro por derecho de nacimiento) a cambio de dinero para comprar cosas que después no vamos a poder disfrutar plenamente por no tener tiempo. Se me viene al recuerdo la película In Time como metáfora perfecta para este tema. Muy recomendable, si tienes tiempo. jeje

Volver al tiempo – windroseblog.es

He podido conocer ya a un buen puñado de personas que han decidido romper este círculo y sacar sus vidas fuera de las autopistas del consumo. No se trata de renunciar a todo, como siempre el equilibrio y la mesura son los maestros a escuchar. Basta con desechar el vicio de comprar, y transformarlo en el placer de hacer. Construir, cocinar, sembrar, aprender, estudiar, observar, jugar, descansar… son algunos de los verbos que imperan sus vidas.

El placer de tomar una cerveza al volver a casa o al terminar de hacer algo, puede convertirse en un lujo inconmensurable cuando en vez de leer la marca pegada a la botella, vemos nuestro trabajo y recordamos la malta, el lúpulo y la pasión artesana.

Cerveza de Ley 100% auténtica – Cerveza casera

Para todos a los que nos apasiona la calidad de una bebida, desde hace unos años hay una novedad en el mercado, que cada vez está ganando más y más fuerza.

Decenas de webs y tiendas especializadas están ofreciendo todo lo necesario para poder convertir nuestra cocina durante un par de horas, en una auténtica fábrica de cerveza de la mejor calidad, sin aditivos ni conservantes; cerveza de ley 100% auténtica y de máximo sabor.

Desde 50€ podemos adquirir un kit con todo lo necesario, eligiendo el tipo de cerveza que queremos realizar o bien probando nuestras propias combinaciones de maltas, lúpulos, fermentos y agua. Por supuesto, una vez adquiridos estos materiales y herramientas, la próxima vez que vayas a hacer cerveza, será mucho más barato. Solo necesitarás los ingredientes.

El proceso es relativamente sencillo, basta con poner atención en algunos momentos claves. Es divertido comprobar lo fácil que resulta poner las chapas en los botellines y esperar a que ocurra el milagro de la refermentación.

La decoración y el etiquetado dejan la puerta abierta al estilo personal de cada uno y con la ayuda de nuestro pc y la impresora doméstica los resultados pueden ser de máxima expectación.

La única pega es que, como todo lo bueno, se hace esperar; así que hay que tener en cuenta que el proceso tarda en completarse entre 15 y 60 días dependiendo de la receta que hayamos elegido. Ale, Ipa, Pilsen, Lagers, negras y rubias… sólo es cuestión de ingredientes y un poco de cariño.

Resultados muy óptimos – Cerveza casera

Tras descubrir el aroma a azúcar quemada de las cebadas malteadas, el intenso y casi embriagador olor del lúpulo en flor, y haber saboreado nuestra propia cerveza tostada, ya nunca volverá a ser lo mismo.

Por supuesto, antes de escribir sobre algo, siempre que es posible; me gusta probarlo por mí mismo, así que puedo decir que los resultados estuvieron muy por encima de lo esperado: el color, el cuerpo, el aroma, la espuma, el sabor…   ¡Insuperable! Y si yo puedo, tú puedes.

Un minuto más antes de terminar;

Voy a terminar con un brindis por todos los que alguna vez nos hemos decidido a hacer las cosas por y para nosotros mismos, a nuestra manera. Una cerveza artesana y casera, unos frutales sembrados pensando en el futuro, una huerta quizás y, por qué no, a lo mejor el placer el escribir para poder leer después.

A los que verdaderamente creáis tener tiempo, os invito a que compartáis vuestra experiencia y opiniones sobre este artículo. Un poco más abajo, la sección de comentarios está para eso, para derrochar el tiempo de aquellos que verdaderamente se sientan ricos en segundos, minutos y horas.

¡Salud!

*Nota: al referirnos a «esta sociedad» y «hambre» creemos oportuno señalar, para evitar malos entendidos, que acotamos la referencia a nuestra sociedad, es decir, país (España), y por extensión, a la Comunidad Europea. Según cifras y publicaciones de ACNUR y la ONU.

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