A camino entre La Costa Brava y las cumbres pirenaicas, se cosecha la I.G.P. Pome de Girona con sus manzanos ofreciendo la fruta del pecado.
Mordiendo la culpa
No se me ocurre mejor forma de presentar esta fruta que la de su simbología e imagen. Coger la manzana del árbol y morderla, o aquella otra que lanzó Discordia «a la más bella», sembrando así la disputa y la acepción de su nombre; son sin lugar a dudas dos de las más conocidas. Tras la sombra del «Pecado Original«, siglos después, como quien lava su nombre de la ignominia; la luz de la sabiduría de Newton se posó en el fruto caído y en el Hombre*. Y lo levantó en su mano, dejando al mundo en su lugar y al adoctrinado sectarismo en la oscuridad de sus templos.
Guillermo Tell y su manzana consagró el respeto a la ley. Su ballesta y su acierto son el pueblo luchando contra la autoridad cuando es la injusticia la que gobierna. La espada se agarra por su manzana cuando es necesario defenderse.
La Gran Manzana llena de luces, regada por las aguas del río Hudson y flanqueada por La Libertad, se erige sobre sus rascacielos, elevando a la humanidad por su propio pie y trabajo. En las manos, más viva y fresca que nunca, pasea digitalizada su imagen**, con la cicatriz de la mordida para no olvidar el engaño.
Blancanieves ya no espera a ningún príncipe para que la despierte. Ya no hay mentira, ni veneno ni sueño. El sabor se disfruta a cada bocado sin miedo y morder es un placer. La manzana podrida se ha apartado del cesto en esta nueva era.
Después de todo lo anterior, manzanas y manzanos vienen a mis ojos, a los del recuerdo de mi paso por aires de tramontana. Windrose apunta hoy hacia el noroeste, hacia el fin de nuestro mapa peninsular, donde las cumbres nevadas ya no dejan seguir más, y de poder, el camino sería llamado le chemin.
I.G.P. Poma De Girona
Al noreste de la Comunidad catalana, en las comarcas de La Selva, El Baix empordá y Alt Empordá, El Girones y el Pla de L´Estany, todas en la provincia de Girona, se sitúa la zona de producción de la Indicación Geográfica Protegida (I.G.P.) Poma de Girona. En 2003, tras décadas de dedicación y expansión del cultivo, llegó finalmente el reconocimiento europeo y la obtención del mencionado sello de calidad I.G.P.
Estas tierras, situadas a corto camino entre las playas mediterráneas de La Costa Brava y las cumbres pirenaicas, han conocido los manzanos desde siempre con gran tradición y reputación en sus cosechas, a través de pequeñas producciones casi siempre dirigidas al autoconsumo. Sería en los años 70 cuando, de la mano de tres grupos privados (Giropoma, Empordá y Girona Fruits), llegaría la comercialización y el descubrimiento para España y Europa de la calidad y preciado sabor de las manzanas cosechadas en Girona.
Cuatro variedades concentran la producción en un reparto de características y cualidades tan significativo, que hace realmente difícil elegir la mejor:
- Golden – Cosechada a principios de septiembre es fácilmente reconocible por su color amarillo verdoso y su gran jugosidad.
- Gala – Su piel estriada de color roja y crema es su carta de presentación. Dulce y firme la describe con justicia. Se cosecha en el mes de agosto.
- Granny smith – La más tardía en llegar a nuestros fruteros, se recolecta en el mes de octubre. De gran crocancia y acidez, presenta un color verde intenso y moteado blanco (lenticelas).
- Red Delicious – Por su nombre es fácil descubrir sus cualidades. Roja intensa, su alto contenido en azúcares le confiere una dulzura exquisita. Septiembre en su mes y es la más indicada para pasteles y horno.
En las fruterías, buscar el pequeño sello adherido a cada pieza es la mejor garantía de llevar a casa una fruta sana, rica y con toda la calidad que esperamos de la huerta española.
Sano como una manzana
Incluir en la dieta diaria varias piezas de frutas es quizás el único consejo que pone de acuerdo a médicos, nutricionistas y dietistas. Por su puesto, en Windrose nos sumamos a tan clara consigna por la parte que nos toca: comprar y consumir cada variedad en su momento es sin lugar a dudas el secreto de la buena mesa y mejor sabor. El melón y las picotas en verano, la castaña en otoño, las naranjas en invierno y las fresas en primavera; son solo un pequeño ejemplo para disfrutar de cada especialidad en su tiempo.
La fruta fresca y en abundancia es el festín de los dioses. Los humanos, condenados como estamos a nuestras pasiones terrenales y nuestra mortalidad, podemos permitirnos el placer de endulzarnos la vida con nuestras recetas caseras y hornos.
El pastel o tarta de manzana, con su punto justo de canela y azúcar, queda a la altura de este mundo, dejando que solo los vapores y aromas suban a los cielos.
¡Salud!
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* Hombre y mujer. El ser humano.
** Marca Appel
